El asistente de grabación del nuevo video clip de Katy Perry tomó con sorpresa el pedido de la cantante: debía acomodar los pechos en la remera con sus dos manos. El joven corrió hasta el set y, gustoso, cumplió la orden de la artista.

Mientras el asistente hacía el curioso trabajo en el ajustado vestuario de la cantante, Katy se mostró relajada y con una sonrisa cómplice en su boca.

Al finalizar la labor el joven se retiró del set para que Perry pudiera continuar con la grabación de su nuevo video Waking Up In Vegas.

En el nuevo clip la cantante se muestra sexy y salvaje, con un vestido muy ajustado y una lluvia que moja todo su cuerpo, mientras ella se mueve de manera sensual. 


Fuente: Daily Mail

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